La intolerancia de la lactosa y los probióticos
Aquí tiene todo lo que tiene que saber sobre la intolerancia a la lactosa y los probióticos.
¿Qué pasa cuando tu cuerpo no puede digerir la lactosa?
Hay una variedad de síntomas cuando se trata de intolerancia a la lactosa. Y aunque la mayoría de las personas pueden experimentar síntomas similares, es importante señalar que hay varias variables a considerar cuando experimentan tales síntomas.
Cosas como la ingestión de lácteos y la capacidad de su cuerpo para producir lactasa son muy importantes. Numerosos síntomas y molestias pueden comenzar a manifestarse tan pronto como 30 minutos y tan lentamente como 2 horas después de comer. Síntomas como el dolor abdominal, la hinchazón, los gases, los calambres y las náuseas a menudo comienzan a manifestarse en las personas intolerantes a la lactosa.
Y es entonces cuando me viene a la mente la siguiente pregunta.
¿Por qué su cuerpo no puede descomponer la lactosa?
La incapacidad de nuestro cuerpo para digerir la lactosa tiene que ver con la ausencia de lactasa en nuestro sistema.
Pero ¿qué es la lactasa?
La lactasa es una enzima producida por las células que se utiliza en el intestino delgado para digerir la lactosa, el azúcar que se encuentra en la mayoría de los productos lácteos.
Cuando hay una falta de lactasa en el cuerpo, comienza a rechazar la absorción de lactosa.
Es normal que el LCT, el gen que produce la lactasa, disminuya después de la infancia. Esta es la razón por la que aproximadamente dos tercios de los adultos de todo el mundo pierden la capacidad de digerir los productos lácteos después de la infancia.
Es importante señalar que la causa de la intolerancia a la lactosa puede ser causada parcialmente por genes, ya que es más común en algunas poblaciones que en otras.
¿Cómo ayudan los probióticos a los síntomas de intolerancia a la lactosa?
Afortunadamente para muchos de nosotros, los estudios han demostrado cómo los probióticos reducen e incluso eliminan los síntomas de intolerancia a la lactosa como la hinchazón y las náuseas.
Se ha demostrado que los probióticos ayudan en la digestión de la lactosa en el intestino delgado, antes de que llegue al colon. Esto se debe en gran parte a varias cepas que se encuentran en los probióticos.
Estas cepas incluyen: Lactobacillus acidophilus y la Lactobacillus bulgaricus
Estás cepas han demostrado ayudar a digerir la lactosa contenida en productos lácteos fermentados.
La Lactobacillus acidophilus en particular ayuda al sistema digestivo a descomponer los azúcares, como la lactosa, en ácido láctico. Es por eso por lo que cada vez más personas recurren a los probióticos, ya que es una excelente manera de aliviar los síntomas dolorosos e incómodos que pueden interferir con su vida diaria y su bienestar general.